El hecho es que este lunes sale en la portada de la revista Interviu Olvido Hormigos. La maestra y concejal socialista del Ayuntamiento de Los Yébenes (Toledo), saltó a la fama porque hace nueve meses se grabó un videillo pajillero que, sugún ella, iba dirigido a su marido. Algún extraño conjuro hizo que el onanístico clip apareciera en internet y, en un tiempo récord, sus jadeos se hicieron presentes en miles de móviles incluyendo el de sus convecinos, votantes y quizás alumnos, que se quedaron boquiabiertos viendo los orgásmicos hobbys de su admirada Olvido. Si bien la concejala denunció como responsable de la difusión de su amoroso vídeo al Alcalde del PP de la localidad, el que ha acabado imputado ha sido Carlos Sánchez, futbolista del Toledo, que fue el real destinatario de la caricia sexual filmada.
Parece probado entonces que la profesora de inglés y no de biología, tenia un amante al cual mantenía encendido con este vicioso mensaje visual. Pasado el tiempo y ya roto el amor o más bien el deseo, el pelotero quiso darlo a conocer al mundo y la lió parda.
Nuestra Hormigos, molesta por la difusión de semejante intimidad, ha declarado que “yo con mi cuerpo hago lo que quiero y mi vida personal a nadie le importa”. Supongo que para demostrar su aplomo y reafirmarse en que a nadie le importa su peculiar manera de vivir la intimidad sexual, y después de pasar por un concurso de saltos de trampolín televisivo, ha aparecido en Interviu en las poses que han hecho, espero que no, de la conocida revista un objeto de culto en el feminismo progre. Más bien, lo que ha hecho suyo es: ya que me han pillado, aprovecho, disfruto y además pagan.
Vaya desde aquí mi más profunda admiración por el photoshop de Interviu y por la congruencia de esta alegre socialista que es capaz de sacar de una auténtica putada triangular (de ella hacia el marido y del amante hacia ella) un fácil y muy rentable nuevo modo de vida.