Sigue la tendencia en las encuestas. Ahora es el Periódico de Catalunya el que nos trae los datos. Desde las últimas elecciones CiU sigue cayendo en picado y ya está en un 20% en intención de voto. Todo un récord, ha disminuido a la mitad sus expectativas en poco más de un año. ERC, que como sanguijuela promocionada le chupa los votos a montones, si bien ya es primera fuerza, deja de ascender. Probablemente los dos han llegado a su techo, uno más que techo, piso y el otro techo sin más. CiU le regala a ERC un 24.4% de sus votantes por aquello de ya puestos queremos el original.
Los que no se aclaran: PSC y PP siguen cayendo. El desconcierto de sus votantes hace que muchos de ellos busquen partidos ideologicamente más claros. El PSC pierde casi un 10% en favor de Iniciativa (IU a nivel nacional) y envía a la abstencionista casi un 12%, menudo récord. Los que ganaban, gobernaron con Maragall y Montilla, siguen perdiendo puestos. Al PP lo abandonan la nada desdeñable cantidad del 29% en favor de Ciutadans, que es el segundo gran triunfador de las locuras de Mas.
Ciutadans, Cs, supera el 13% y sigue subiendo, puede doblar escaños, lo cual no está nada mal. Tiene la ventaja de la coherencia, de la frescura del recién llegado a la política que no está viciado por el adocenamiento del viejo vicioso. ¿Sabrá resistir a los cantos de sirena del chollo de la política? El tiempo lo dirá. Hoy por hoy es el partido que menos defrauda y que más expectativas levanta. A favor su limpia historia. En contra tiene que su bisoñez, igual no le permite volar sin caer de bruces. Aquella famosa frase que le dirigieron a Zapatero, no cambies, habrá que decírsela a Rivera. Con Zapatero salió fatal, con Rivera es una incógnita.