El hecho es que el Real Instituto Elcano presentó ayer un estudio sobre la Marca España. De los países donde se realizó la encuesta, Alemania es la nación que tiene la imagen de España más negativa, tanto es así que cuatro de cada diez alemanes nos ven «ociosos y poco trabajadores», un 71% cataloga a España como un país «pobre» y un 48% de los alemanes cree que España es un país «corrupto», porcentaje que llega hasta el 55% en el caso de los entrevistados con estudios universitarios. Vamos, como para salir corriendo…
Los que antes, supongo que fruto de muchos finos y sangría, nos catalogaban como los “prusianos del sur” ahora, iluminados de realismo, piensan en nosotros como los holgazanes de la playa.
Que nos consideren corruptos no es de extrañar, ya el Lazarillo de Tormes se hacía eco de esta realidad y la verdad es que desde entonces hemos ido a mucho más. No hay día en que la prensa no desvele algún caso de mangantes desde muy arriba hasta más arriba todavía.
Lo de ociosos y poco trabajadores es sin duda bastante realista. Tengo la sensación de que toda la legislación española tiende a que seamos así: Trabajar lo justo que es cuando pagas menos impuestos, vacaciones y puentes a manta para fomentar el turismo, agotar el paro porque nadie te sancionará, conseguir chupar del PER o similar, porque así para hacer lo mismo se ocupa a más gente y, si te cansas mucho, la Junta de Andalucía te lo resuelve con un ERE a medida. Curiosamente en España se legisla para el jeta y el manta y, no lo olvidemos, ya desde pequeñitos, se prima el no estudiar: ¿Repetir por suspender? no, que discrimina.
La realidad mal que nos pese, es que muchos ciudadanos alemanes que veranean en España y nos conocen, están convencidos de que gracias a su trabajo e impuestos se mantiene viva y en alza nuestra ociosidad.