En un periódico económico nacional el presidente de la Comunidad de Madrid se despacha a gusto para defender su modelo, algo liberal, en el marco impositivo. Actualmente Ignacio González, sucesor o heredero más bien de Esperanza Aguirre, sigue en el ámbito fiscal lo que de hecho era el programa electoral del PP no solo para Madrid sino para toda España: Bajar impuestos impulsa la economía y hace que de hecho se recaude más. Así de fácil.
Madrid, que tiene menos IRPF, que en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados tiene las tasas más bajas de España y que bonifica el impuesto de Sucesiones y Donaciones haciéndolo en la práctica igual a cero, tiene una tasa de paro de seis puntos menos que la media nacional y sigue claramente en la senda del crecimiento. La nueva reforma fiscal nacional amenaza con obligar a todos los españoles a pagar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones y el presidente de Madrid se rebela y espera que al final este error no se produzca.
No entiendo nada. ¿No fue el propio PP el que siempre explicó que hay impuestos injustos porque gravan dos veces por lo mismo a los ciudadanos? ¿No forma parte de la famosa corresponsabilidad fiscal que la CCAA que administra bien pueda bajar sus impuestos? ¿No será que algunas comunidades, que no saben vivir sin recaudar más, se sienten avergonzadas si otras dan más servicios recaudando menos? ¿Alguien me lo explica?