Amen de una espléndida fábrica de relojes, Suiza es el modelo perfecto del ecosistema que necesita el dinero: orden, tranquilidad y discreción. Suiza era eso y su bien más preciado era el secreto bancario, que consideraba al dinero solo como dinero sin importar ni de quién era, ni de dónde venia, ni nada de nada, y eso, además, por ley.

La UE, en plena crisis económica, lucha contra el dinero que se escapa a sus controles, mejor dicho a sus impuestos, y luchará contra la economía sumergida y contra los paraísos fiscales. Suiza ha tenido que ceder algo pero ha contraatacado con la emigración. La UE, ahora se revuelve echándoles del plan Erasmus y de fondos I+D. No creo que llegue la sangre al río y más pronto que tarde ambos cederán.

No entiendo nada. ¿Cómo es posible que si el lastre más importante para la economía de la UE son los paraísos fiscales Bruselas no luche abiertamente contra ellos? ¿No será que siempre es bueno tener ‘vías de escape’ controladas y más bien amigas para que cuando lo necesites sepas con quien negociar? ¿Es aplicable en esto una variante del famoso refrán ‘mas vale mal conocido que bien por conocer’? ¿Alguien me lo explica?