Tuitter: @jmfrancas Web: http://sinpostureo.com You tube: https://www.youtube.com/channel/UCUGcEzxyMJwuOCBNnjwPDxg?view_as=subscriber
Una vez pasada la euforia callejera del último 8 de marzo donde miles de mujeres y hombres, chicas y chicos más bien, portando pancartas de lo más sugerentes aunque muchas bien cutres, me ha vuelta a la cabeza una entrevista que leí en la revista ‘PAPEL’ de ‘El Mundo’ a Camile Paglia, la neoyorquina ‘feminista a la que odian las feministas’ y que me encantó. Esta profesora y escritora atea, lesbiana y libertaria, coincide con muchos de mis planteamientos cuando distingo entre feminismo, igualdad de derechos y deberes entre hombre y mujer, y el hembrismo, una idiotez dogmática de aversión a lo masculino y luchadora frente a un ficticio ‘heteropatriarcado’.
Camile, desmitificando la brecha salarial, “las mujeres suelen elegir trabajos más flexibles (y, por lo tanto, peor pagados) para poder dedicarse a sus familias añade Camile” habla de la libertad que tiene, también las féminas, de decidir a lo que se dedican ya que “muchas prefieren un trabajo más flexible para pasar más tiempo con sus hijos y no dejarlos al cuidado de extraños”. Ella es partidaria de “las mujeres fuertes, que son capaces de crecer y protegerse solas. No de las que corren a refugiarse en las leyes o en un comité” y huye de esa nueva visión hembrista que “¡ha conseguido envenenar la atmósfera cultural con su aversión a lo masculino!” transformando el llamado feminismo en “una forma de religión” con sus dogmas “centrándose en la ideología y en la retórica antimasculina en lugar de hacerlo en el análisis objetivo de los datos, de la psicología humana y el significado de la vida”. Camile no cree que la carrera laboral deba ser lo más importante de la vida de una persona y por ello afirma que “si permites que tu trabajo defina tu personalidad, es que eres un enfermo”. Antes del trabajo está la persona, “la vida real es también la familia, los amigos…”
No entiendo nada. ¿No sería mejor dar la batalla entre todos en la equidad entre hombres y mujeres y no en esta nueva la lucha de clases que es la lucha entre sexos? ¿Alguien me lo explica?
Estoy totalmente de acuerdo con usted, tocayo. No he visto una forma más estúpida de tirar piedras a su tejado. Están más despistadas que un nazareno en el Rocío. Se están discriminando ellas solas. Aunque no me gusta el palabro feminismo, lo acepto como igualdad que significa tener los mismos derechos y obligaciones, pero compartiendo y con este enfrentamiento están separándose del hombre y reflejando un complejo de inferioridad imaginario en sus mentes fanatizadas por la supuesta modernidad que les inculcan los partidos que las manipulan. Me parece bien las manifestaciones, así se han ganado muchos derechos cuando no había una democracia tan consolidada y reconocida como la que disfrutamos hoy en día, donde existen otros cauces para lograr sus reivindicaciones, como por ejemplo la Constitución y el Estado de Derecho. Que busquen en el hombre un aliado y no un enemigo, verán cómo se consiguen y no les hagan caso a esas revolucionarias de pacotilla que incitan al enfrentamiento que nos puede llevar a una situación parecida a la catalana y supondría el fin de nuestra democracia.