El hecho es que sigue el caos informativo, la cosa va a peor. Hacienda atribuye a un error adjudicar a la infanta la venta de las fincas; técnicos de Hacienda, a través de su asociación Gestha, ni entienden ni se creen nada; el abogado de la infanta acepta el error de la Agencia Tributaria y declara que no la demandará; el Colegio de Registradores de España asegura, en un comunicado, que las fincas en cuestión ni están, ni han estado nunca, registradas a nombre de la Infanta, y el Consejo General del Notariado abunda en esta misma idea.
Y ahora, ¿qué? Parece claro que la Infanta Cristina nunca ha tenido nada que ver con las fincas que se le atribuyen en la información que posee Hacienda. Es curioso que teniendo Hacienda la información sobre estas ventas por parte de la Infanta y a pesar de no haber tributado por ellas, nadie de la Agencia movió un solo dedo para enviar un requerimiento del pago del impuesto o cuanto menos para exigir una explicación.
Una vez destapado el misterio por el informe de Hacienda enviado al juez, y cinco días después, la Agencia Tributaria justifica el sorprendente hallazgo por un supuesto error, trece errores, informáticos al equivocar los DNI de los que supuestamente vendieron las propiedades -de momento nadie se pregunta por su identidad ni siquiera por su existencia-, de manera que, oh casualidad, quedó registrado el DNI -tan peculiar con solo dos dígitos- de la Infanta. ¿Quién ha sido?
Sin comentarios ..con Hacienda hemos topado, y tu no pagues que veras lo que te pasa , hay que j…