No sé tanta economía como para hacer un sesudo análisis de los efectos del previsible Brexit sobre la economía española y la Unión Europea en general. No se por tanto si, por razones económicas, a España le conviene el sí o el no Británico. Primero por que no todo es economía y segundo por que ni siquiera un buen negocio puede mantener una relación en la que una de las partes, o las dos, no quieren tenerla.
Lo que parecía un simple referéndum de trámite como promesa electoral de un primer ministro, Cameron, cuyas encuestas le hacían peligrar la victoria, se ha convertido en una auténtica pesadilla. El próximo 23 de junio los ciudadanos del Reino Unido dirán si quieren permanecer en la Unión en un marco que, gracias a la amenaza del Brexit, consolida e incluso aumenta su situación de excepcionalidad en la manera de ser europeos.
Cabe la opción de que quieran seguir en la UE en las nuevas condiciones pactadas o cabe, y cada día es más probable, que voten por el adiós definitivo, con la esperanza de negociar algún tratado que minimice los efectos negativos y les permitan seguir gozando de lo que para ellos, especialmente para su economía, son las ventajas.
Cuando más me hablan de las ventajas que suponen para ellos las nuevas condiciones para seguir en la Europa comunitaria, más sensación de idiota se me pone al seguir siendo europeísta. Salga sí o no, el precedente para la UE es nefasto y es probable que suponga una estocada definitiva a lo que pudo ser y ya difícilmente serán los Estados Unidos de Europa.
No entiendo nada. La UE es una Unión de Estados inicialmente económica con vistas a ser una unidad política real, ¿caben excepciones antes de acabar definiendo la regla? ¿Alguien me lo explica?
En tiempos pasados, cuando la navegación quedaba interrumpida en el canal de la Mancha, los británicos decían que el Continente (el resto de Europa) estaba aislado. Era lógico, eran los amos del mundo y sus mares. No ha cambiado tanto la mentalidad británica. El error fue meterles en la UE. Creo que el Brexit es lo mejor para todos.
Sobre si eso es bueno para España, pues depende de cuál España estemos hablando. Para la del PP todo esto es un gigantesco error, preguntarle a la gente es una verdadera estupidez, porque la gente está ahí para ser gobernada por los que saben y están preparados. Darle a la gente el derecho a decidir es inconcebible, ya que un mugroso obrero de Bristol no tiene ni la menor idea de lo que le conviene, hay que decidir por él, aunque sea contra él. El referéndum ha sido un horrible mal ejemplo para España sin importar el resultado concreto.
Si existe otra España que cree en la libertad y en la soberanía de los ciudadanos, para ellos el referéndum ha sido otro buen ejemplo procedente de la pérfida Albión. El voto del mugroso obrero de Bristol es una joya de la democracia, un valor que hay que cuidar con esmero.
Finalmente, los ingleses seguirán viniendo a disfrutar la vida en España. Los españoles seguirán visitando UK. Esperemos que no se tengan que ir para abortar como pasaba en los forrenta. El mundo no se acabará para los britones, existe vida fuera de la UE. Y si la UE se autodestruye no será porque se vaya Britania, sino por los alucinantes gobernantes que tiene.